El pasado miércoles 16 de setiembre se realizó el taller virtual “Diseño Higiénico: Estrategia para minimizar riesgos en la industria alimentaria” que contó con la participación especial de una experta en la temática integrante del Centro Tecnológico AINIA (España). Asistieron a dicho taller integrantes de 18 empresas del rubro alimentos y bebidas, que residen en 8 departamentos de nuestro país.
El diseño higiénico de equipos e instalaciones es una de las principales herramientas con las que cuentan las industrias alimentarias para garantizar la inocuidad de los productos que ofrecen al consumidor. El diseño de un equipo o instalación se considera higiénico cuando incorpora características que reducen o eliminan el riesgo de ser una fuente de contaminación para los productos elaborados, tanto de forma directa como indirecta, ya sea porque faciliten la incorporación de algún contaminante (producto acumulado, restos de productos químicos, lubricantes) o porque dificulten las actividades de mantenimiento, limpieza y desinfección. Además, el diseño higiénico conlleva a menudo ventajas económicas derivadas del menor impacto medioambiental asociado a su uso, debido a la reducción del esfuerzo en la limpieza y desinfección.
En este sentido, el pasado miércoles 16 de setiembre, Impulsa Alimentos y Latitud -Fundación LATU, realizaron el taller “Diseño Higiénico: Estrategia para minimizar riesgos en la industria alimentaria”, donde se presentaron los principios básicos y requisitos generales para el diseño higiénico de equipos e instalaciones de procesamiento de alimentos, y los vínculos entre el diseño higiénico y la seguridad alimentaria. La actividad, que contó con el apoyo de AINIA y EHEDG (European Hygienic Engineering & Design Group), tuvo la participación de 23 personas integrantes de 18 empresas del rubro alimentos y bebidas nacionales pertenecientes a 8 departamentos de nuestro país. Además, presenciaron las exposiciones, 6 integrantes de empresas provenientes de Argentina, Brasil y España.
Exposiciones sobre la temática
En primera instancia, Q.F. Rosa Márquez, Coordinadora de Latitud, presentó a dicha institución y los motivos por los cuales es importante incorporar el diseño higiénico en las empresas industriales, haciendo hincapié en las 5 áreas claves: edificación, servicios higiénicos, equipos y diseño de procesos, sistema de limpieza y desinfección, y la higiene del personal. Además, Latitud es miembro y sede regional de EHEDG en Uruguay; quienes suministran guías, realizan capacitaciones y certifican equipos higiénicos, desarrollando y validando metodologías.
Luego, Ing. Agr. María Irene Llorca, integrante de AINIA (sede regional de EHEDG en España), presentó los requisitos generales de diseño higiénico, siendo este un elemento clave para la inocuidad alimentaria y la sostenibilidad. Puntualmente, expuso sobre los principios generales de Diseño Higiénico de equipos (materiales y superficies, uniones, drenabilidad y zonas muertas), instalación y montaje de equipos y el diseño higiénico de plantas e instalaciones alimentarias.
En cuanto a la limpieza de equipos, la experta comentó: “Los procesos de limpieza de equipos deben ser menos agresivos y más sostenibles. ¿Cómo lo logramos? Con procesos más cortos, utilizando productos menos abrasivos y produciendo con equipos de características específicas”.
Para finalizar, Q.F. Inés Martínez, Investigadora de Latitud, presentó el Programa Inocuidad aplicado a la industria de dicha institución que busca mejorar la competitividad de la cadena agroalimentaria nacional mediante acciones que fortalezcan y consoliden la inocuidad en toda la cadena productiva. Además, compartió con los participantes información sobre el Diagnóstico en Inocuidad y vida útil que lleva adelante en conjunto con Impulsa Alimentos; un servicio dirigido a las empresas de la industria alimentaria que deseen conocer las oportunidades de mejora en sus productos y/o procesos productivos vinculados a la inocuidad.
María Irene Llorca Rosa Márquez Inés Martínez
Más información sobre el Diagnóstico en Inocuidad y vida útil